El Lenguaje de lo Inefable
Matías Prado expone por primera vez en un formato distinto y con técnicas ajenas a su trabajo de ilustración, al que se ha dedicado en los últimos años y que se ha materializado en libros, agendas, prendas de vestir y murales, construyendo así un universo gráfico y material propio y reconocible.
En esta muestra en Isabel Croxatto Galería, El Lenguaje de lo Inefable, Matías se presenta de una forma nueva, saliendo de terrenos que ya conoce y domina, como la acuarela o el lápiz sobre papel, para acercarse a técnicas y medios que empieza recién a explorar, como el acrílico sobre tela y la cerámica. Este desplazamiento es una movida que a él, producto de su inquietud como artista, le ha resultado natural, pero es también, y sobre todo, una búsqueda honesta de nuevas formas que anima a ver su trabajo sin prejuicios y a compartir la aventura de resignificar su propio lenguaje.
En esta serie de pinturas, Matías continúa su trabajo con la figura humana y consigue nuevas sensaciones gracias a la escala casi gigante de las obras (especialmente en relación a las miniaturas con las que había trabajado hasta ahora), y donde la técnica le permite ir en busca de soluciones espaciales y de colorido que antes estaban reservadas sólo a lo espontáneo. Este “nuevo tiempo” ofrece reflexiones mayores en lo emocional y lo introspectivo, algo que él mismo enuncia en los títulos de sus pinturas, alejándose de lo que formalmente podría asociarse a la escuela de la Bauhaus o, en Latinoamérica, a la Escuela del Sur. En su caso, no es tanto una estética de formas y colores, sino que ambiciona respuestas más profundas: es una inmersión en el misterio de la pintura, donde no hay terrenos seguros, y donde sólo su luz interna podrá llevarlo a saber si esas emociones que busca de verdad están allí, entre los colores y las formas.
La exposición comprende también un grupo de cerámicas de pequeño formato que Matías aborda sin pretensión alguna, de manera muy vital, y que asombra por su naturalidad con el material; en estas cerámicas, la frescura de los colores y el gesto simple y sincero de lo manual enamora y contagia.
Jorge Carroza Solar, galerista y anticuario.
Mayo 2024.